No puedes hacerlo cuantas veces quieras, porque, yo caigo bajo tu boca más veces de las que respiras.
No vienes y, sin embargo, aquí vives: en mis dedos, en mis manos, en mis piernas, en mi vientre, en mis senos, en toda la piel que esconde del fuego que es tu presencia.
Dices aire y me haces polvo. Conjugas los verbos para doblegar mi centro y destruirme en un santiamén.
Debes saber que, aunque te claves en mí cerebro y te vea en cada hora de mis días, mi corazón a muerto hace un tanto y desde ese día he olvidado lo que amaba, y tú ibas en esa ruina. No serás el mayor de mis dolores pues ya he padecido. Fuera de esta advertencia júzgame loca y dame la vuelta. Ven a mis tierras y tómame completa. Te juro que puedes pedirme lo que sea.
Todas tus letras son tan hermosas y muertas como las flores que le mandas a ella.
Inventamos, creamos
realidad
mentira
o qué se yo
el error cósmico que seria la extinción de
tú y yo.
Jugamos el rol que nos hace amos del universo
para poder ver quien al final
doblega su libertad.
"Te he visto boxear y me he enamorado de ti"
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